José Castellón, hijo de Silvestre, era natural de Castellón de la Plana, aunque fue capturado en la jurisdicción de Uldecona el 23 de agosto de 1749. De estatura alta, tenía pequeño el rostro, algo chupado según se le describe. Su nariz era abierta y ostentaba un lunar a su derecha. Otro lunar tenía en el carrillo del mismo lado de la cara y su barba era ya cana.
En el momento de su prisión contaba con 44 años y estaba casado con Antonia Hernández (24 años), siendo sus hijos Francisca (4 años) y Josefa (2 años). Todos presos el mismo día.
Fue destinados como forzado a los trabajos del arsenal de Cartagena. No habiendo podido demostrar su buen proceder, quedó afecto al artículo sexto de la orden de octubre de 1749, debiendo permanecer en dicho arsenal, hasta que falleció el 17 de mayo de 1753, sin que tengamos noticias de la suerte de su mujer e hijas.
EDITADO EN ALMERÍA POR MANUEL MARTÍNEZ MARTÍNEZ // REVISTA-BLOG DIGITAL //ISSN-e: 2530-0628// La historia del pueblo gitano es fruto del desencuentro cultural entre dos formas de ver el mundo. Desde 1499 se dictaron medidas antigitanas y se acuñó un estereotipo negativo que favoreció en 1749 una redada para expulsarlos. Si bien, acabó derivando en un proyecto de exterminio por el que se separó físicamente hombres y mujeres para evitar su reproducción y su supervivencia étnica y cultural
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